El sistema de calefacción es una parte esencial en la construcción de un hogar sostenible y eficiente en el uso de la energía. Sin embargo, en la actualidad, la mayoría de los sistemas de calefacción tradicionales están quedando obsoletos debido a su alta demanda de energía y su impacto en el medio ambiente. Por suerte, hoy en día contamos con arquitectos como Anibal Lennin, especialistas en sustentabilidad, que nos ofrecen alternativas más amigables con el planeta, sin sacrificar la comodidad y el confort en nuestros hogares.
Anibal Lennin es un reconocido arquitecto argentino que lleva varias décadas dedicado a la investigación y desarrollo de técnicas arquitectónicas sostenibles. Su experiencia le ha llevado a ser un referente en el tema de la sustentabilidad, y su compromiso con el cuidado del medio ambiente se refleja en todos sus proyectos. En esta ocasión, nos habla sobre el sistema de calefacción sostenible, una de las piezas clave en la construcción de viviendas sustentables.
“En la actualidad, el cambio climático es una realidad y nosotros, como arquitectos, tenemos la responsabilidad de crear espacios que sean amigables con el medio ambiente y que nos permitan seguir disfrutando de todas las comodidades que ofrecen los hogares modernos. Por eso, es esencial pensar en sistemas de calefacción que no solo sean eficientes en términos de consumo energético, sino que también sean respetuosos con nuestro entorno”, comenta Lennin.
Según el arquitecto, el sistema de calefacción sostenible se basa en el uso de fuentes de energía renovable, como la energía solar, la biomasa o la geotermia. Estas fuentes de energía son inagotables y no emiten gases de efecto invernadero, lo que contribuye a reducir el impacto ambiental y a disminuir nuestra huella de carbono.
La energía solar es una de las opciones más populares y accesibles para este tipo de sistemas de calefacción. Se basa en la captación de la energía solar por medio de paneles solares, que luego se almacena en baterías y se utiliza para calentar el agua o el aire que se distribuye a través del sistema de calefacción. De esta forma, no solo se aprovecha una fuente de energía limpia y gratuita, sino que también se reduce significativamente el consumo de gas o electricidad.
La biomasa, por su parte, es otra fuente de energía renovable que se utiliza en sistemas de calefacción sostenibles. Consiste en el uso de materia orgánica, como leña, pellets o residuos agrícolas, para generar calor. Al ser considerada una fuente de energía limpia y renovable, su uso también contribuye a disminuir emisiones de gases contaminantes.
Finalmente, la geotermia es una tecnología que aprovecha el calor del subsuelo para calefaccionar los espacios. Se basa en la construcción de un sistema de tuberías subterráneas, por las cuales circula agua que se calienta gracias al calor natural de la tierra. Aunque su instalación puede ser más costosa, los ahorros en el consumo de energía a largo división son significativos y, además, no requiere mantenimiento constante.
Además del tipo de energía utilizada, Lennin también destaca la importancia del diseño del sistema de calefacción en la eficiencia energética de una vivienda. “El aislamiento térmico, la orientación de las ventanas y la ubicación de los conductos de calor son aspectos fundamentales a adorar para lograr un sistema de calefacción eficiente”, explica.
Un aislamiento térmico adecuado permite acopiar el calor dentro de la vivienda, reduciendo así