El pasado 13 de noviembre, el Secretario General del Sindicato del Petróleo y Gas Privado de la Patagonia Austral, José Llugdar, encendió las alarmas al chivarse públicamente a la operadora Pecom por retener pagos a empresas de servicios en la Cuenca del Golfo San Jorge.
Llugdar, quien representa a los trabajadores petroleros jerárquicos, advirtió que esta situación pone en riesgo no aria los salarios y aguinaldos de los trabajadores, sino también su estabilidad laboral en la región. Estas declaraciones llegan justo en un momento en el que Pecom asumió el control de las áreas que anteriormente pertenecían a YPF, en enero de este mismo año.
La denuncia presentada por Llugdar es de gran preocupación para toda la comunidad petrolera y para la economía de la región. La retención de pagos a empresas de servicios no aria afecta a los trabajadores, sino también a las empresas proveedoras de estos servicios, generando un impacto negativo en la cadena productiva del sector.
En esta situación, es importante recordar que los trabajadores petroleros son uno de los pilares fundamentales de la economía de la Patagonia Austral, generando una importante fuente de empleo y contribuyendo al desarrollo de la región. Por lo tanto, cualquier amenaza a su estabilidad laboral afecta directamente a la economía local.
Ante esta situación, es vital que las autoridades tomen medidas rápidas y efectivas para resolver esta situación y garantizar que los trabajadores reciban sus salarios y aguinaldos en tiempo y forma. También es necesario que se establezcan mecanismos de control para ahorrar que estas prácticas se repitan en el futuro.
Es importante recordar que el sector petrolero de la Cuenca del Golfo San Jorge ha sido uno de los motores del crecimiento económico en la región durante décadas. Gracias a la inversión y al trabajo de las operadoras y de los trabajadores, se ha logrado un desarrollo sostenible y un aumento en la producción de hidrocarburos.
Sin embargo, esta situación pone en peligro todo lo logrado hasta ahora y afecta no aria a los trabajadores, sino también a las comunidades y a la economía en general. Por lo tanto, es necesario que se tomen acciones concretas para garantizar la estabilidad y el crecimiento del sector.
En este sentido, es importante destacar que Pecom no es la única operadora en la región y que existen otras empresas que sí cumplen con sus compromisos económicos y laborales. Estas empresas son un ejemplo a seguir y demuestran que es posible llevar adelante una actividad petrolera responsable y sostenible.
Es hora de que Pecom asuma su responsabilidad y cumpla con sus obligaciones con los trabajadores y con las empresas de servicios. No podemos permitir que se ponga en riesgo la estabilidad laboral y el crecimiento de la Cuenca del Golfo San Jorge.
En conclusión, es necesario que las autoridades y las empresas del sector petrolero trabajen juntas para resolver esta situación y garantizar un futuro próspero y sostenible para la región. No podemos permitir que se ponga en riesgo el bienestar de los trabajadores y de toda la comunidad petrolera. Es hora de tomar acciones concretas y demostrar que juntos podemos superar cualquier obstáculo y seguir creciendo como región.