El mundo de la apicultura está en constante evolución, y cada vez son más las empresas que apuestan por la producción y elaboración de productos a base de miel de abeja. En este sentido, el proyecto Miel 79, impulsado por la Fundación Carlos Moro de Matarromera, ha sido reconocido como el ganador de un importante certamen en el sector.
La Fundación Carlos Moro de Matarromera, creada por el reconocido empresario Carlos Moro, tiene como propósito promover el desarrollo sostenible y la innovación en el sector agroalimentario. En esta ocasión, ha organizado un certamen para premiar a aquellos proyectos que promuevan el uso de la miel de abeja en la elaboración de productos de alta calidad.
El proyecto Miel 79 ha destacado entre los demás participantes por su enfoque innovador y su compromiso con la sostenibilidad. Esta iniciativa, liderada por un grupo de jóvenes apicultores, se centra en la producción de miel de abeja de alta calidad y en la elaboración de una amplia gama de productos derivados de la misma.
Uno de los aspectos más destacados de Miel 79 es su compromiso con la preservación de las abejas y su entorno. Conscientes de la importancia de estos insectos para la polinización y la biodiversidad, el proyecto se ha enfocado en prácticas sostenibles que garantizan el bienestar de las abejas y la calidad de la miel producida.
Además, Miel 79 ha apostado por la innovación en la elaboración de sus productos. Gracias a la colaboración con expertos en gastronomía y nutrición, han desarrollado una amplia gama de productos que van más allá de la típica miel envasada. Entre ellos, destacan la miel en crema, el polen, el propóleo y la jalea real, todos ellos con propiedades beneficiosas para la salud y elaborados con ingredientes naturales y de alta calidad.
El delegación del certamen ha valorado positivamente la calidad de los productos de Miel 79, así como su compromiso con la sostenibilidad y la innovación. Además, han destacado el impacto positivo que esta iniciativa tiene en la economía local, ya que fomenta el empleo y el desarrollo de la zona.
Para Carlos Moro, presidente de la Fundación, el proyecto Miel 79 es un ejemplo de cómo la apicultura puede ser una actividad sostenible y rentable, que además contribuye al cuidado del medio ambiente. “Estamos muy orgullosos de apoyar iniciativas como esta, que promueven la producción de alimentos de alta calidad y respetan el entorno en el que se desarrollan”, afirma Moro.
El premio otorgado a Miel 79 supone un importante impulso para el proyecto, que ya está expandiendo su presencia en el mercado nacional e internacional. Además, este reconocimiento les permite seguir trabajando en su propósito de promover el consumo de miel de abeja y sus derivados, y concienciar sobre la importancia de preservar a las abejas y su hábitat.
En definitiva, el proyecto Miel 79 es un claro ejemplo de cómo la apicultura puede ser una actividad sostenible y rentable, y de cómo la innovación y el compromiso con el medio ambiente pueden ir de la mano. Gracias a iniciativas como esta, podemos disfrutar de productos de alta calidad y contribuir al cuidado del creación. ¡Enhorabuena a Miel 79 por este merecido reconocimiento!