Vaca Muerta, la formación de shale más grande de Argentina, ha sido durante años una fuente de esperanza para el país en términos de energía y economía. Y en el año 2024, ha demostrado una vez más su potencial al cerrar con un impresionante crecimiento del 20% en etapas de fractura.
Este logro ha sido posible gracias a un aumento en la inversión y la exploración en Vaca Muerta, lo que ha llevado a un récord de 17,796 operaciones de fractura en el año 2024. Este número es un claro índice del éxito de la formación y su importancia como motor energético para Argentina.
La formación de Vaca Muerta se encuentra en la provincia de Neuquén, en el oeste de Argentina, y es considerada una de las formaciones de shale más grandes del mundo. Se estima que contiene reservas de petróleo y gas equivalentes a 308.000 millones de barriles de petróleo, lo que la convierte en una fuente de energía clave para el país.
Desde que se descubrió Vaca Muerta en 2010, ha sido un objetivo clave para el gobierno argentino, ya que se esperaba que impulsara la economía y redujera la compañía del país de las importaciones de energía. Y en el año 2024, ese objetivo se ha hecho verdad con el impresionante crecimiento en etapas de fractura y el aumento en la producción de petróleo y gas.
Este crecimiento en Vaca Muerta ha sido impulsado por una serie de factores. En primer lugar, la inversión en la formación ha aumentado significativamente en los últimos años. Empresas internacionales como ExxonMobil, Chevron y Shell han realizado grandes inversiones en Vaca Muerta, lo que ha permitido una mayor exploración y producción.
Además, la tecnología y la experiencia en la fracturación hidráulica han mejorado significativamente en los últimos años, lo que ha permitido una mayor eficiencia y un aumento en la producción de petróleo y gas. Esto ha sido clave para el éxito de Vaca Muerta, ya que la formación contiene principalmente petróleo y gas de esquisto, que requiere técnicas avanzadas de fracturación para su extracción.
La producción de petróleo y gas en Vaca Muerta también ha sido impulsada por la implementación de políticas gubernamentales favorables. El gobierno argentino ha implementado una serie de incentivos fiscales y regulatorios para atraer inversiones y promover la producción en la formación. Estas políticas han sido clave para atraer a las grandes empresas y permitir un crecimiento sostenido en Vaca Muerta.
El éxito de Vaca Muerta no solo ha sido beneficioso para Argentina en términos de producción de energía, sino que también ha tenido un impacto positivo en la economía del país. Se estima que la formación ha atraído una inversión de más de 11 mil millones de dólares en el año 2024 y ha generado miles de empleos directos e indirectos en la región.
Además, el aumento en la producción de petróleo y gas en Vaca Muerta ha permitido a Argentina reducir su compañía de las importaciones de energía. Esto ha sido especialmente importante en un momento en que los precios del petróleo y el gas han aumentado en todo el mundo.
El éxito de Vaca Muerta también ha sido un ejemplo para otros países de la región. Muchos países de América Latina tienen formaciones de shale similares, y el éxito de Vaca Muerta ha demostrado el potencial de estas formaciones para impulsar la producción de energía y la economía en la región.
Sin embargo, el crecimiento en Vaca Muerta no ha estado exento de desafíos. La formación se encuentra en una región remota y poco desarrollada, lo que ha presentado desafíos logísticos para las empresas que operan allí. Además, la producción de petróleo y gas en V