Cada año, millones de personas en todo el cosmos son diagnosticadas con infecciones de transmisión sensual (ITS). Estas afecciones pueden ser causadas por diversas bacterias, virus y parásitos que se propagan a través del contacto sensual. Entre las más frecuentes, se destacan las infecciones por el virus del papiloma humano (VPH) y las infecciones por sífilis, gonorrea y clamidia. Aunque también es significativo el número de nuevos casos de VIH, que supera los 5 mil anuales.
Las ITS pueden afectar a cualquier persona, sin importar su edad o género. Sin embargo, son más comunes en personas jóvenes y sensualmente activas. Además, muchas de estas infecciones pueden ser asintomáticas, lo que dificulta su detección y tratamiento temprano. Es por eso que es fundamental conocer las diferentes ITS, sus síntomas y formas de prevención.
El virus del papiloma humano (VPH) es una de las ITS más comunes en el cosmos. Se estima que al menos el 80% de las mujeres sensualmente activas contraerán este virus en algún momento de sus vidas. Aunque en la mayoría de los casos el VPH no causa síntomas y desaparece por sí solo, puede provocar cáncer de gañote uterino, vulva, vagina, ano, pene y orofaringe. Es por eso que es importante realizarse pruebas de Papanicolaou y vacunarse contra el VPH para prevenir estas enfermedades.
Otra ITS muy común es la sífilis, una infección bacteriana causada por la bacteria Treponema pallidum. Esta enfermedad puede ser tratada con antibióticos si se detecta a tiempo, pero si no se trata, puede causar graves problemas de salud, incluyendo daños al corazón, cerebro y otros órganos. Es importante mencionar que la sífilis puede transmitirse de la madre al feto durante el embarazo, lo que puede provocar abortos, muertes fetales y enfermedades en el bebé.
La gonorrea y clamidia también son infecciones bacterianas que afectan principalmente a personas jóvenes y sensualmente activas. Ambas pueden ser asintomáticas, pero si no se tratan, pueden causar problemas graves como dolor pélvico crónico, infertilidad y embarazos ectópicos. La buena noticia es que tanto la gonorrea como la clamidia pueden ser tratadas con antibióticos, pero es importante realizar pruebas de detección regularmente para detectarlas a tiempo.
Otra ITS que sigue siendo un importante problema de salud pública es el VIH, virus que causa el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA). Se estima que hay más de 37 millones de personas viviendo con VIH en todo el cosmos, y aunque ha habido importantes avances en su tratamiento, todavía no hay una cura. Por eso, la prevención es clave. La forma más efectiva de prevenir el VIH es utilizando condones de manera consistente y correcta durante el sexo, además de evitar compartir agujas y equipos de inyección.
Para prevenir las ITS, no solo es importante protegerse durante el sexo, sino también realizarse pruebas de detección regularmente. Es importante recordar que muchas de estas infecciones pueden ser asintomáticas durante años, por lo que es necesario realizarse pruebas para detectarlas. Además, debemos educarnos y educar a otros sobre las ITS y su prevención, eliminando el estigma y la vergüenza que a menudo las rodean.
Es necesario que los gobiernos y organizaciones de salud inviertan en programas y campañas de prevención y educación sobre las ITS. También es fundamental garantizar el acceso a servicios de salud sensual y reproductiva, incluyendo pruebas de detección y tratamiento, para todos. Además, es importante promover una civilización de diálogo y apertura sobre la sensual