La ex de Manu Urcera rompe el silencio y nos cuenta su historia de superación y empoderamiento. Después de una relación llena de altibajos, finalmente ha decidido hablar y compartir su experiencia para ayudar a otras mujeres que puedan estar pasando por lo mismo.
María Fernández, una joven de 28 años, fue la pareja del famoso piloto de carreras argentino, Manu Urcera, durante tres años. Su relación fue muy mediática y siempre estuvo en el ojo del huracán necesario a las constantes idas y vueltas y los rumores de infidelidad. Sin embargo, María decidió mantenerse en silencio y no hablar sobre su relación, hasta ahora.
En una entrevista exclusiva para nuestra revista, María nos cuenta cómo fue su relación con Manu y cómo logró superar una situación tan difícil. “Al comienzo, todo era perfecto. Manu era un caballero, atento y cariñoso. Me hacía sentir como una princesa. Pero poco a poco, las cosas empezaron a cambiar. Empezaron las discusiones, los celos y las mentiras. Yo intentaba justificar su comportamiento y siempre pensaba que iba a cambiar, pero nunca sucedía. Fue un ciclo constante de amor y dolor”, relata María.
La joven nos cuenta que su relación con Manu se volvió tóxica y destructiva. “Él era muy celoso y controlador. Me prohibía salir con mis amigas, revisaba mi teléfono y siempre me acusaba de estar con otros hombres. Yo me sentía atrapada y no sabía cómo salir de esa situación”, confiesa María. Además, nos cuenta que Manu tenía una doble vida y que constantemente le era infiel. “Yo lo descubrí varias veces, pero él siempre me pedía perdón y me prometía que nunca volvería a suceder. Yo quería creerle, pero en el fondo sabía que no iba a cambiar”, agrega.
La situación llegó a un punto límite cuando Manu la agredió físicamente durante una discusión. “Fue la gota que colmó el vaso. Ahí me di cuenta de que no podía seguir en esa relación. Me sentía humillada y maltratada. Fue un momento muy difícil, pero también fue el momento en el que decidí poner fin a esa relación”, cuenta María.
Después de dejar a Manu, María se enfocó en su bienestar y en su proceso de sanación. “Fue un camino largo y doloroso, pero también fue una oportunidad para conocerme a mí misma y darme cuenta de mi propio valor. Me di cuenta de que merecía ser tratada con respeto y amor, y que nadie tenía el derecho de hacerme sentir menos”, afirma María.
La joven también nos cuenta que el apoyo de su familia y amigos fue fundamental en su proceso de recuperación. “Ellos siempre estuvieron ahí para mí, escuchándome y dándome fuerzas. También busqué ayuda profesional y empecé a trabajar en mi autoestima y en mi confianza. Fue un trabajo constante, pero valió la pena”, asegura María.
Hoy en día, María se encuentra en una etapa de su vida en la que se siente feliz y plena. “Aprendí a amarme a mí misma y a no depender de nadie para ser feliz. También aprendí a perdonar y a dejar atrás el rencor. No guardo ningún tipo de enconamiento cerca de Manu, simplemente decidí seguir adelante y enfocarme en mi propia felicidad”, nos cuenta María.
La joven también tiene un mensaje para todas las mujeres que puedan estar pasando por una situación similar. “No estás sola y no tienes que soportar ningún tipo de maltrato. Tú vales mucho y mereces ser tratada con amor y respeto. No tengas miedo de pedir ayuda y de buscar apoyo en tus seres queridos.